jueves, 4 de julio de 2019

THE CHESTERFIELD KINGS


Obsesionados con el año 1966. Así estaban The Chesterfield Kings en sus inicios, una banda de Nueva York que cuando comenzó su carrera afirmaron que jamás iban a sonar más allá de dicho año, acérrimos seguidores del garage rock 60’s, la psicodelia y la Invasión Británica.

Estamos ante un grupo nacido en 1979 pero que suenan y se visten como una banda de mediados de los años 60, recuperan músicas de bandas míticas como Rolling Stones, Beatles, Kinks, Blues Magoos, Yardbirds, Zombies, Byrds, Remains o Chocolate Watchband y su sapiencia melómana destapa una gran cantidad conjuntos oscuros del garaje americano 60’s, como The Brogues, Painted Ship o The Moving Sidewalks. El grupo se forma a finales de los años 70 liderado por el cantante Greg Prevost, vocalista obsesionado con los primeros Rolling Stones, y el bajista Andy Babiuk, un estudioso de la música de los Beatles y los Stones. Melómanos hasta la médula y coleccionistas de discos de la década clave del rock, su erudición se apreciará a lo largo de su carrera con canciones propias deudoras de sonidos pretéritos y versiones de conjuntos 60’s escasamente conocidos. De los grandes grupos recogerán adaptaciones de canciones de la época dorada, algunas ni siquiera publicadas por sus referentes.

Junto al guitarrista Rick Cona, el teclista Orest Guran y el batería Doug Meecham, Prevost y Babiuk publicaron su imprescindible LP debut, Here Are The Chesterfield Kings (1983), un disco publicado en el sello Mirror Records que sonaba como un álbum de garaje 60’s con herencia de la Invasión Británica, retazos de R&B stoniano y folk-rock Byrds. El álbum, compuesto por excitantes y briosas versiones, está integrado por sensacionales cortes de piezas muy poco conocidas del prodigioso decenio, con excelentes composiciones de los Rogues (“You Better Look Now”), los Exotics (“Come With Me”), Mourning Reign (“Satisfaction Guaranteed”), Moving Sidewalks (“99th Floor”), Zakary Thaks (“Won’t Come Back”) o Shades of Night (“Fluctuation”). Los temas más populares son “Outside Chance” de los Turtles, “The Hustler” de los Sonics y “Expo 2000” y “No way out”, ambos de la Chocolate Watchband.

Este disco, una delicia para los amantes de los sonidos de los años 60 y para los melómanos en general, fue continuado por otro trabajo esencial: Stop! (1985). En este LP se aprecia la habilidad en la composición del quinteto, remedando con su escritura las estructuras, instrumentación y sonidos de los 60 y conformando un magistral y vibrante disco con soberbias canciones de poco más de dos minutos (algunas ni eso) como “It’s Alright”, I Cannot Find Her, “Cry Your Eyes Out”, “You Belong To Me” o el magnífico single She Told Me LiesTambién se acuerdan de los Golliwogs (la futura Creedence Clearwater Revival) y graban el tema “Fight Fire”. Para su tercer disco se produjo la baja del teclista Guran, quien fue sustituido por Walt O’Brien para grabar Don’t Open Till Doomsday (1987), otro magnífico disco que contenía temas propios de gran nivel como “Selfish Little Girl” o “No Mind No Soul”, y una plausible adaptación de la banda neozelandés de los 60 The Bluestars, la garajera “Social End Product”. 

La gran joya es una maravilla de tema muy soterrado de los Kinks, titulado “Time Will Tell”. Después de un disco recopilatorio con actuaciones en estudio y en vivo titulado Night Of The Living Eyes (1989), los Chesterfield Kings publicaron The Berlin Wall of Sound, un disco menor en el cual su sonido se aleja un tanto de sus primeros discos al igual que su imagen, que parece progresar con rasgos setenteros, como una mezcla entre los Rolling Stones, The Stooges y los New York Dolls. De la formación original solamente quedaban ya sus dos principales componentes, Greg Prevost y Andy Babiuk. En el disco Drunk on Muddy Waters (1990), de tirada limitada, realizaban su personal homenaje al blues.

Tras cuatro años de silencio los Chesterfield Kings retornaban con el magnífico Let’s Get Stoned (1994), un álbum tributo a los Rolling Stones que mixturaba temas propios resonantes del grupo londinense y dos versiones de la banda de Jagger/Richards, la conocida “Street Fighting Man” y “Can’t Believe It”, una estupenda canción nunca publicada por los Stones que había sido grabada en principio para el LP “Between The Buttons” con el título provisional de “Get Yourself Together” pero que finalmente fue desechada de las sesiones de grabación del espléndido disco stoniano. Un invitado de lujo en el álbum, con portada que imitaba la carátula del “Aftermath” en su versión americana, fue Mick Taylor, quien aparece tocando la guitarra en la adaptación de Mose Allison “I’m Not Talking”, canción que habían versionado en los 60 los Yardbirds.

En 1997 los Chesterfield Kings decidieron realizar su rendición a la música surf. Se acicalaron como los mismísimos Beach Boys y publicaron el álbum Surfin’ Rampage (1997), una delicia de disco doble que parecían retrotraerse a 1964 recuperando sonidos de los citados Beach Boys, los Surfaris, los Sunrays, Jan & Dean, los Fantastic Baggys o The Pyramids. Where The Action Is (1999), un Lp publicado en Sundazed, supuso de nuevo un disco con ascendencias de la Invasión Británica y el garage-rock 60’s, con versiones de los Hollies (“Look Through Any Window”), Kinks (“I’m Not Like Everybody Else”), Yardbirds (“Happenings Ten Years Time Ago”), Keith Allison (“Action, Action, Action”), Electric Prunes (“Ain’t It Hard”), The Third Bardo (“I’m Five Years Ahead Of My Time”), Chocolat Watchband (Misty Lane) o Spiders, el nombre en los años 60 de la Alice Cooper Band, (“Don’t Blow Your Mind”). En el álbum colaboraba Mark Lyndsay, el miembro de Paul Revere & The Raiders, quien también ayudó en tareas de composición al co-escribir con la banda el tema Where Do We Go From Here

The Mindbending Sounds Of (2003) era un disco publicado en Sundazed y compuesto enteramente por temas propios que retomaba de manera formidable la senda garajera de sus inicios y los sonidos del año 66. Fue presentado con el fenomenal single I Don’t Understand, co-escrito con Steven Van Zandt (Little Steven), miembro de la E Street Band de Bruce Springsteen quien también co-produce el álbum junto a Babiuk y Prevost. Al margen de su capacidad como músico y compositor, Greg Prevost edita una revista dedicada a los años 60 llamada “Outasite” y Andy Babiuk publicó en el año 2001 un conocido y documentado libro sobre los Beatles que lleva por título “Beatles Gear”, un volumen óptimo sobre todos los instrumentos utilizados por el cuarteto de Liverpool durante su trascendental trayectoria.

DISCOGRAFÍA seleccionada,
SINGLES:




Resto de ÁLBUMES:






Fuente: alohacriticon.com
Fotografía: slacker.com
Carátulas discos: discogs.com


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